Únete a nosotros para reducir el uso de combustibles fósiles en los viajes aéreos
La aviación representa alrededor del 2,5 % de las emisiones globales de CO₂. Además del CO₂, los vuelos generan otras emisiones que pueden contribuir al calentamiento global, especialmente a grandes altitudes.
El combustible sostenible de aviación (SAF) es una alternativa al queroseno fósil que contribuye a reducir la dependencia de la industria aérea de los combustibles fósiles Producido a partir de recursos no fósiles, como aceites usados de cocina, el SAF tiene un impacto de carbono significativamente menor que el queroseno de origen fósil cuando se evalúa a lo largo de todo su ciclo de vida.
Durante la combustión, el SAF emite niveles de CO₂ similares a los del queroseno fósil. Sin embargo, mientras que los combustibles fósiles aumentan el nivel total de CO₂ en la atmósfera al liberar carbono que ha estado atrapado bajo tierra durante millones de años, el SAF recicla el CO₂ que fue absorbido durante el crecimiento de la biomasa utilizada como materia prima.
Aunque el SAF representa un paso positivo, su uso en la aviación sigue siendo limitado debido a sus altos costes y a su baja disponibilidad. Como resultado, su impacto actual en la huella de carbono del sector de la aviación sigue siendo modesto. Por ello, aumentar el uso y la producción de SAF es un objetivo común para todos los que trabajamos para reducir la dependencia de la aviación de los combustibles fósiles.